Que tu cuenta de resultados no empañe tu responsabilidad como empresa. Quizá no muchas compañías se adhieran a esta postura, pero cuando nos encontramos con alguna que sí comparte este planteamiento trabajamos especialmente a gusto.
Es el caso de la empresa funeraria Serfuja, con la que nos unen varios proyectos desde 2018, casi desde el momento en que empezamos nuestra actividad. De todos ellos, quizá el más especial sea el que estamos desarrollando juntos en la actualidad.
Desde ese 2018, el estilo de comunicación de la empresa estuvo marcado por un componente didáctico en un campo de actividad -el de la muerte- que tradicionalmente siempre fue muy oscuro. Con esta perspectiva, y dando continuidad a un espíritu de transparencia y luminosidad que se refleja en la construcción de las propias instalaciones de la empresa, Serfuja promovió la primera jornada de puertas abiertas en un tanatorio de la provincia, organizó un concurso infantil sobre la muerte para naturalizar esta realidad o diseñó un ciclo de conferencias sobre el fallecimiento con ponentes como el forense del caso Diana Quer, entre otros proyectos que diseñamos conjuntamente en este periodo.
Ahora, este 2022 es el turno de la elaboración de un manual de prevención del suicidio, una guía específicamente dirigida a colectivos sanitarios, pero de utilidad para el conjunto de la sociedad. A esta iniciativa liderada por la firma lucense se han sumado figuras de primer nivel en el ámbito nacional, como el portavoz de la plataforma Stop Suicidios, Román Reyes, o Héctor Castiñeira, autor del célebre personaje ‘Enfermera Saturada’, así como las directivas de los tres principales colegios profesionales sanitarios de la provincia de Lugo (el de Enfermeros, el de Médicos y el de Veterinarios).
Esta actuación refleja el ADN de esta empresa familiar, ya que en ella confluyen dos de las líneas que, desde el prisma comunicativo, han venido caracterizando su presencia pública: la aplicación de una estrategia de comunicación de valor y de valores -incluso cuando parezca ir en contra de sus propios intereses de negocio- y también un carácter disruptivo en un sector con una tendencia hermética que, precisamente, Serfuja trata de romper.
Más allá de dotar de coherencia los distintos proyectos impulsados por la empresa y de que estos sirvan para reforzar un relato de marca propio, el apoyo de la comunicación es esencial para conseguir que todo ello permee en la sociedad y le resulte útil. Como este manual de suicidios que presentarán en las próximas semanas.