Dejar de fumar, apuntarse (o simplemente ir) al gimnasio, aprender inglés… Todo 31 de diciembre marca un antes y un después en esa lista de propósitos que todos nos fijamos cada vez que el 1 de enero llama impaciente a la puerta.
Si echamos la vista atrás a este 2018, mentiríamos si dijésemos que para Atalaya Comunicación no fue un gran año. Y es que en estos 14 meses de vida que llevamos nos hemos implicado en un total de 25 proyectos de sectores muy dispares: desde el ámbito sociosanitario hasta la tecnología y la cultura, pasando por el ámbito audiovisual, la formación o la estética, entre otros.
Además, el 2018 fue el período en el que, al tiempo que ampliamos nuestro equipo, también dimos el salto nacional al asumir trabajos que se orientan a todo el mercado español y que plantean ya incluso un horizonte internacional. Esto no quiere decir que no nos encante el trato con clientes locales de Lugo, que han supuesto prácticamente la mitad de nuestra facturación de este ejercicio.
Tenemos que reconocer que nos resultaría imposible quedarnos con un solo momento de este intenso 2018 porque cada uno de los proyectos que gestionamos tiene su encanto. Pero, sin duda, uno de los instantes favoritos lo vivimos el día 9 de septiembre de 2018 cuando la lucense Tania Fernández García se alzó con una medalla de bronce en el Campeonato Mundial de Piragüismo de Maratón en K2, llevando la marca de Atalaya Comunicación en su pala en una retransmisión seguida a nivel internacional.
Sin lugar a dudas, resistencia y constancia son dos valores que resumen bien el día a día de un deportista como Tania Fernández. Nosotros también aplicamos estas cualidades a nuestro trabajo, conscientes de las exigencias cada vez mayores de nuestros clientes.
En resumen, este 2018 que ya se va le puso el listón muy alto al 2019. Pero estamos convencidos de que, con nuestra actitud y nuestro compromiso, podremos superarlo incluso en este año que entra. Feliz año nuevo!